El hotel de los difíciles es un balneario moderno. En él se dan cita un inmoral abogado de narcotraficantes empeñado en ahogar la traición de su exmujer en alcohol, una mujer suicida que no consigue encajar el paso del tiempo y toda una serie de desahuciados personajes. A él llega como resto del naufragio de su matrimonio, Julián, y en la compañía de sus huéspedes y servicio encontrará esporádicas distracciones de su postración, hasta que un hecho inusitado provocará en él una reacción que marcará un antes y un después. La fuerza narrativa de la novela cautiva desde la primera línea. Su exuberante fantasía explota entre las manos a través de un realismo a veces descabellado, a veces desesperado. Pero, sobre todo, una sólida sensación de autenticidad mantiene vivos a sus personajes en nuestra conciencia, mucho después de haber cerrado el libro: como solo lo consiguen las mejores historias.