Una novela a la vez atmosférica y llena de suspense; la más ingeniosa de Louise Penny hasta la fecha. Felizmente retirado en el idílico pueblo de Three Pines, el inspector jefe Armand Gamache ha hallado un remanso de paz difícil de imaginar. Pero la monótona placidez de la lectura y la felicidad del sol matutino se truncan cuando Clara Morrow le cuenta que Peter, su marido, ha incumplido la promesa de volver a casa un año después de su separación y le pide ayuda para encontrarlo. A medida que Gamache se sumerge en el caso, también lo hace en la torturada mente de Peter Morrow, un pintor tan desesperado por recuperar su fama que sería capaz de vender su alma al diablo. Junto con su antiguo segundo al mando, Jean-Guy Beauvoir, y Myrna Landers, emprende un viaje que los llevará cada vez más lejos de Three Pines, hasta la desembocadura del río San Lorenzo, para acabar descubriendo un rastro mortal de envidia y engaño que pondrá su vida en peligro. Décima entrega de la extraordinaria serie protagonizada por Armand Gamache que ha cautivado a más de once millones de lectores en todo el mundo, El largo camino a casa es una penetrante investigación psicológica sobre la creación y la lucha de los artistas consigo mismos y con su obra. Una novela atmosférica, tensa y vertiginosa a un tiempo; sin duda, la más ingeniosa de Louise Penny hasta la fecha. «Una obra de arte que trasciende el género, atrapa de principio a fin y, como todos los libros de Penny, deja al lector deslumbrado.»- Richmond Times-Dispatch. ENGLISH DESCRIPTION Following the Japanese attack on Pearl Harbor on December 7, 1941, a giant four-engine Pan American Airways Boeing flying boat, registered as NC18602, under the command of Captain Robert Ford, embarked on a remarkable journey. Caught en route over the South Pacific at the time of the Japanese attack, Captain Ford and his crew were forced into a flight plan than none of them had anticipated when they left San Francisco on December 1st for what was to have been a routine round trip commercial flight to Auckland, New Zealand. Faced with the threat of interception by Japanese forces, they were ordered to take their strategically valuable aircraft on a globe-girdling, 31,500 mile, six-week odyssey, heading westward mostly across territory that had never been flown over before by such a large commercial aircraft. With no suitable navigation charts, no certainty of obtaining fuel or servicing, and under a total veil of secrecy and radio blackout, they threaded their way across the war zones of the Far East, the Middle East, Africa, the South Atlantic, Brazil, and the Caribbean, to bring their aircraft home safely to New York.